A propósito del día del médico

Saludos nuevamente
En esta ocasión les quiero participar algunos datos interesantes de como era la práctica de la medicina  en la Real Audiencia de Quito en el siglo XVIII.
Este es un estracto del informe editado en el año 2012 que se titula Grandes enfermedades que asolaron a Quito y a Guayaquil durante el siglo XVIII y que forma parte del repostorio de la Universidad Andina Simon Bolivar.
Uno de los parráfos mas interesantes habla sobre la falta de médicos reconocidos en en territorio de la audiencia y la escasez de medicamentos (no confundir con nuestra situación actual) lo que llevaba a la necesidad de acudir a "curanderos", "fregadores" y "barberos" quienes con técnicas de curación poco aceptables para la época actual trataban diferentes dolencias y males que aquejaban a la población. Uno de los episodios más dramáticos que se relata en este texto tiene que ver con las sangrias que era una técnica muy común en la época. Cito a continuación textualmente " Este sujeto encontraba en el tratamiento a la sangre el mejor método curativo,  siempre como “humor pecante” y se precipitaba  a sacarla no solo en  onzas sino  en  libras”,luego obligaba a los enfermos a una dieta rígida  sin concederles alimento por muchas horas y proporcionándoles purgantes de los más “vehementes” al mismo tiempo, como  resultado al tratamiento referido se  experimentaban efectos de una extrema debilidad lo que se denominaba en ese momento“pérdida de los espíritus más nobles”.
Otro ejemplo de la pauperrima situación en la que se desenvolvía la salud en ese tiempo fue lo sucedido en una niña indígena en la cual uno de los curanderos más famosos de la localidad " mandó a  rapar la cabeza a navaja, le puso un “capasete” de una arroba de nieve encima, la metió en un barro ardientísimo  y después la sacó a que corra 40 o más  ventosas y finalmente le extrajo mucha sangre. El resultado fue el estado de mayor locura que le hizo ir al Hospital Real de la Caridad”.

Comentario final
A propósito del día del médico es importante echar una visión al pasado y conocer los origenes de como se ejercía la medicina en lo que actualmente en es el Ecuador, sin embargo y lomas preocupante de todo es aue en algunos casos seguimos teniendo una mentalidad arcaica sobre el verdadero sentido de lo que es el ser médico.
Lamentablemente en nuestros días, aun se tiene un escaso criterio sobre lo que representa la formación médica en nuestro país donde se considera al interno o al médico residente como un oficinist más y los procesos de selección de dicho personal se sigue haciendo a través del "sabio" e "ilustrado" criterio del personal de talento humano de las diferentes casas de salud como si se tratase de cualquier personal administrativo, cuando en realidad este proceso debe ser realizado exclusivamente por personal médico por intermedio de un examen de conocimientos que permita avalar las condiciones de ese profesional que por otro lado, está en una de las épocas más cruciales y sensibles de su formación y de la cual dependerá para el resto de su ejercicio profesional.
Cuando será el día que dejemos atrás de una vez por todas el legado de ser "barberos" y "curanderos" y pasemos a una verdadera política nacional de profesionalización de la formación de los futuros médicos en nuestro país. No vaya ser que alguien en 100 años escriba una crónica similar a esta sobre lo que nosotros somos y lo que hacemos hoy.....